Haiti. Tercera tarde de terror y alta tensión en Puerto Príncipe

Por Resumen Latinoamericano, 02 de marzo de 2023.

El miércoles 1 de marzo de 2023, por tercera tarde consecutiva (después de las del lunes 27 y martes 28 de febrero de 2023), el crepitar de armas pesadas preocupó a los habitantes y residentes del centro de Port-au-Prince.

Hasta tarde, en la noche del miércoles 1 al jueves 2 de marzo de 2023, el sonido de las balas seguía resonando en los oídos angustiados de muchas personas.

¿Qué sucederá durante esta noche del 1 al 2 de marzo de 2023, que probablemente será muy larga y dolorosa?. muchos se preguntaron.

Lo peor de esta situación es que todas las casas del centro de Port-au-Prince todavía están privadas de electricidad pública, que no se distribuye desde hace mucho tiempo. Esto hace problemática la comunicación por teléfonos celulares, que al igual que las computadoras portátiles, no se pueden recargar con energía.

A partir de las 15:00 hora local (20:00 gmt), los conductores de transporte público, provenientes de Delmas (noreste) y Pétionville (este), intentaron evitar el fondo de Delmas, la avenida Martin Luther King, más conocida como “ Nazon” (una arteria perpendicular a la carretera a Delmas) y John Brown Avenue, más conocida como “Lalue” (paralela a Delmas).

Hubo considerables atascos en las vías de acceso periférico y corredores, que tomaron los automovilistas, para no caer en las zonas de crepitar de armas, lo que generaba zozobra.

Estos disparos de armas de fuego parecían ser provocados por bandas criminales que querían aumentar sus áreas de territorio, desde el fondo de Delmas, pasando por Sans Fil, el área de Poste Marchand, el área de Champ de Mars (principal plaza pública de la capital, que alberga las oficinas administrativas de lo que queda del Palacio Nacional, desde el terremoto del martes 12 de enero de 2010) y otros distritos aledaños, como Bel Air (que da al Champ de Mars, al noreste).

Todos trataban de regresar a sus casas lo más rápido posible, mientras que el resto de vecinos mantenían cerradas las puertas de sus casas, cobijándose de la mejor manera posible, incluidos los niños y otros familiares.

Esto resultó en mucho pánico y tensión.

Las actividades informales tuvieron que cesar de inmediato, ya que el crepitar de las armas parecía cada vez más cercano a los lugares de residencia.

La tarde del martes 28 de febrero de 2023, un número indeterminado de personas resultaron heridas de bala en el distrito de Solino, que se extiende desde la avenida Martin Luther King hasta la calle Saint Martin (de este a oeste), informan los residentes.

Evidentemente, la información es difícil de obtener de los distintos barrios de la parte baja de la ciudad de Port-au-Prince, donde los habitantes intentaban esconderse, con los medios posibles al alcance de la mano.

Ya no hay ninguna institución pública que pueda venir al rescate, brindar alguna ayuda

Es la destrucción aparentemente programada de todos aquellos, a lo que se recurriría durante estos múltiples casos de ataques armados, que se han vuelto demasiado extremos, desde hace muchos meses, en casi todo Haití.

Como ha ocurrido con muchos ataques de bandas armadas en los últimos años, hay un silencio por parte de las autoridades de facto y de la Policía Nacional de Haití (PNH), que no dan absolutamente ninguna información sobre lo que sucede en la ciudad de Port-au- Prince, entregado con impunidad a bandas criminales.

Corresponde entonces a cada familia encontrar las formas adecuadas de ponerse a cubierto, para evitar sufrir las lamentables consecuencias de estos macabros hechos, que producen daños de indescriptible magnitud.

Muchas familias ya se han dado a la fuga, tratando de mudarse a otros lugares menos agitados.

Durante los próximos días, las familias se verán obligadas a no enviar a los niños a la escuela, donde la jornada escolar (acortada desde el intento de reapertura a finales de noviembre de 2022) se encuentra suspendida ante el terror de las bandas armadas.

Por cuánto tiempo ? ¿Hasta cuando?

Nadie sabe.

Sin escrúpulos, las autoridades de facto se mantienen cruzadas de brazos, mostrando un desprecio indecible por el deterioro cada vez más sistemático de los derechos humanos, prefiriendo esperar, dicen, la intervención de fuerzas militares extranjeras para restablecer la seguridad en el territorio haitiano.

Fuente: Alterpresse

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