Palestina. La crisis política israelí y las estrategias de Netanyahu

Por Valeria Rodríguez, Resumen de Medio Oriente, 28 de abril de 2021.

Está semana en Palestina nuevamente se dieron a conocer una serie de represiones en Jerusalén cuando musulmanes palestinos se disponían a realizar sus plegarias en la Mezquita de Al Aqsa, en el marco del sagrado mes de ramadán.

Es de esperar que el ejercito sionista aproveche el mes de ayuno para llevar a cabo ataques y fuertes represiones que son respondidas con la resistencia de los palestinos.

La semana pasada comenzó una escalada de violencia después que la entidad sionista bombardeara una zona cercana a Damasco, Siria y como respuesta a ello dos días después un misil disparado desde Siria impactó en Dimona, cerca de las instalaciones nucleares sionistas.

Cabe destacar que  el sistema de seguridad israelí, “domo de hierro” no interceptó el misil lo cual encendió las alarmas ya que por primera vez sucede algo así, lo cual pone en duda la seguridad de la entidad sionista y a su vez demuestra que la resistencia cuenta con un desarrollo armamentístico que Israel no suponía.

Todo esto se desarrolla en un escenario de crisis interna dentro de la entidad sionista ya que los fracasos tanto internos como externos de Netanyahu dan cuenta de un estancamiento político y como lo ha hecho en otras oportunidades, Netanyahu apela a la violencia para cambiar el foco de la realidad..

Hay que recordar que a fines de marzo se llevaron a cabo las elecciones parlamentarias, a través de las cuales se debe conformar gobierno a través de una serie de acuerdos políticos pero estos acuerdos no son tan sencillos de lograr, de hecho, en las elecciones pasadas el acuerdo entre Benjamin Netanyahu y Benny Grantz duró muy poco tiempo.

De hecho y tras una serie de investigaciones por corrupción, Netanyahu ha perdido aceptación y no ha podido lograr persuadir a Naftali Bennet que es la figurita de la extrema derecha, el partido Yamina, que es fundamental para lograr la legitimidad necesaria para formar gobierno ( junto con Benny Grantz).

Además de esto, cabe recordar que a principios de abril comenzó el período de indagatorias en el juicio por corrupción en Jerusalén los cuales son conocidos como los casos mil, dos mil y cuatro mil que tienen que ver con sobornos a una serie de compañias de telecomunicaciones. Esto se dio en medio de una serie de manifestaciones sociales que pedían la dimisión del primer ministro.

A su vez, el Tribunal Supremo israelí bloqueó el nombramiento del nuevo titular de Justicia propuesto por el primer ministro en funciones, Benjamín Netanyahu, actualmente procesado por corrupción, y que generó oposición en el Gabinete al considerarlo un aliado del mandatario.

A nivel de política exterior también se pueden notar ciertos fracasos como la relacionada al acuerdo nuclear, ya que hay grandes posibilidades de que Estados Unidos retorne al mismo  independientemente de los deseos de Israel.

Además,hay que reconocer que  la política del ex presidente de los Estados Unidos, Donald Trump , de retirarse del acuerdo nuclear con Irán no logró sus objetivos esperados, ya que no pudieron  impedir el avance del proyecto nuclear persa y como contrapartida de ello, Irán consiguió desarrollar una alianza con China.

A esto se le suma el cambio en la correlación de fuerzas con Estados Unidos, ya que la administración Biden no está dispuesta a ceder sus intereses y esto impacta negativamente en la escena política del primer ministro en función.

En estas circunstancias, Netanyahu, al igual que Trump, siguió una política de presión, y al igual que Trump, que incitó a sus seguidores a amotinarse en las calles de Estados Unidos tras la derrota en las elecciones presidenciales de Estados Unidos, las acciones fascistas de colonos y milicias sionistas contra los palestinos en la Jerusalén ocupada y en la mezquita de Al-Aqsa, es uno de los métodos de Netanyahu para crear el caos y escapar de las crisis.

En la Jerusalén ocupada, la organización fascista israelí Lahua, con la ayuda de la policía del régimen sionista ocupante y con el apoyo oficial del gabinete de Netanyahu, lanzó una brutal represión contra los palestinos.

Pero después de eso, las fuerzas de resistencia en la Franja de Gaza atacaron con al menos 30 misiles los asentamientos sionistas, lo que causó pánico en el frente israelí. Además, los palestinos, desde ancianos hasta jóvenes, mujeres y niños en la Jerusalén ocupada y otras áreas palestinas, se levantaron contra los crímenes del régimen sionista ocupante con el lema de unidad y solidaridad nacional, allanando el camino para el comienzo de Tercera Intifada.

Pero a nivel de política exterior, para escapar de la crisis, Netanyahu recurrió a actos como la piratería y el sabotaje contra los buques mercantes iraníes en el Mediterráneo y el Mar Rojo, y actos terroristas contra las instalaciones nucleares de Irán en Natanz, encaminados a crear un conflicto entre Estados Unidos e Irán, o al menos la interrupción de los esfuerzos para reactivar el acuerdo nuclear, provocó la ira de los europeos y las críticas a la administración Biden.

Después de que Netanyahu no logró sus objetivos, el Mossad y el servicio de inteligencia israelí anunciaron en una reunión del gabinete de seguridad del régimen a principios de la semana pasada que Estados Unidos estaba comprometido con la estrategia de la administración Biden y con los intereses estratégicos de Estados Unidos. En consecuencia, Tel Aviv decidió enviar una delegación de alto nivel a Estados Unidos para tratar de evitar que se volviera a un acuerdo nuclear con Irán.

La delegación incluyó a Meir bin Shabat, asesor de seguridad interna de Israel, Avio Kokhawi, jefe de personal del ejército, Tamir Haiman, jefe de la unidad de inteligencia militar de Israel, y el jefe del Mossad, Yossi Cohen. Por otro lado, Jack Sullivan, el asesor de seguridad nacional de Estados Unidos en las conversaciones de Viena, dijo que las conversaciones fueron constructivas y que hay un esfuerzo real para volver al acuerdo nuclear de 2015.

En general, Netanyahu está tratando hasta el último minuto de no revivir el acuerdo nuclear, al menos en un futuro cercano, y está tratando de convencer al gobierno de Biden de que regrese gradualmente al acuerdo y no levante las sanciones contra Irán; Para que este proceso de regreso al acuerdo nuclear no termine hasta el final de la administración Biden.

Los próximos días serán cruciales para la vida política de Benjamin Netanyahu, y no está claro si podrá regresar al poder en Tel Aviv o si tendrá que pasar por los pasillos de los tribunales israelíes, que también pueden durar años. como castigos como largas penas de prisión.