Internacional. Preocupación por Assange, cuya extradición decide este lunes un tribunal británico

Resumen Latinoamericano, 3 de enero de 2020.

Un tribunal británico decide mañana sobre la extradición a EEUU del activista de WikiLeaks Julian Assange, tras una década de persecuciones. El Gobierno alemán y el relator sobre tortura de la ONU han alertado sobre la vulnerabilidad y el estado de salud de Assange

Una jueza británica decidirá mañana la suerte del fundador de WikiLeaks, Julian Assange, en prisión desde setiembre, tras una década de persecuciones por las filtraciones de documentos que implican a varios gobiernos en violaciones de derechos humanos, sobre todo a EEUU, que lo acusa de revelar secretos de Estado.

Si agota todas sus opciones de apelación dentro del sistema judicial británico, podría llegar a recurrir al Tribunal Europeo de Derechos Humanos, lo que podría dilatar el proceso durante años.

El fundador de Wikileaks se encuentra en la prisión de alta seguridad londinense de Belmarsh, a la espera de que se resuelva el proceso. Previamente, permaneció durante años refugiado en la embajada de Ecuador en Gran Bretaña, donde fue detenido en abril de 2019.

Assange se enfrenta en EEUU a 175 años de prisión por haber difundido, hasta 2010, más de 700.000 documentos clasificados sobre actividades militares y diplomáticas estadounidenses, particularmente en Irak y Afganistán.

La posibilidad de que sea extraditado a EEUU ha suscitado la preocupación de instancias internacionales, como el Gobierno alemán. Su comisionada de Derechos Humanos, Barbel Kofler, pidió a las autoridades británicas que tengan en cuenta los aspectos humanitarios y el estado de salud corporal y psíquico en el proceso de extradición, subrayando que seguirá el caso «de cerca». Durante el tiempo de encierro en la embajada y en prisión la salud del periodista se ha deteriorado notablemente.

Michael Kopelman, el siquiatra de la defensa de Assange ha alertado en varias ocasiones de que el programador y activista sufre una depresión severa y comportamientos suicidas.

Alemania recordó a Gran Bretaña sus responsabilidades en el marco de la Convención Europea de Derechos Humanos y aludió a la posible pena a la que podría ser sometido Assange en territorio estadounidense. Igualmente, el relator de la ONU sobre la tortura, Niels Melzer, envió una carta abierta al presidente de EEUU, Donald Trump, pidiéndole que perdone a Assange, porque «no es un enemigo del pueblo estadounidense».

«Su organización, WikiLeaks, lucha contra el secreto y la corrupción en todo el mundo y, por lo tanto, actúa en el interés público tanto del pueblo estadounidense como de toda la humanidad», escribió Melzer.

You must be logged in to post a comment Login