Palestina. Las condiciones de la cárcel de Israel matarán a los prisioneros palestinos antes de que lo haga el coronavirus / Colonos encapuchados incendian vehículos palestinos en la Cisjordania ocupada

Resumen Medio Oriente, 15 abril 2020

Los prisioneros palestinos que hoy están encarcelados luchan en dos frentes: uno contra la pandemia del coronavirus y el otro contra las terribles condiciones de cárceles de Israel; se mueren tratando de sobrevivir.

Hasta el momento, cuatro prisioneros palestinos han dado positivo por el coronavirus. Se espera que este número aumente bastante, dadas las condiciones inhumanas y de hacinamiento que ellos se encuentran. Otro detenido dio positivo por el virus unos días después de su liberación.

Hay aproximadamente 5,000 prisioneros políticos palestinos detenidos en cárceles israelíes, según el grupo de derechos de los prisioneros Addameer.

Más de 700 hombres y mujeres presos en las cárceles israelíes necesitan urgente atención médica, 17 de los cuales se encuentran en estado crítico en el hospital de la prisión de Ramla, que carece de los estándares adecuados de atención médica.

La mayoría está hacinada en espacios reducidos, donde los prisioneros no pueden practicar ningún tipo de distanciamiento social, y sin los insumos y equipo de limpieza y atención médica necesarios para garantizar su seguridad de un contagio incluso menos mortal que el coronavirus.

Numerosas organizaciones han advertido que solo se necesitaría una persona infectada para transmitir el virus a toda la población cautiva y provocar una tragedia devastadora.

A pesar de los llamados a liberar prisioneros para salvar vidas, las autoridades israelíes no están asumiendo la responsabilidad y responder el clamor de las preocupaciones internacionales para proteger a los prisioneros palestinos.

Todo lo contrario, Israel está utilizando el pretexto del coronavirus para aumentar su abuso sobre los detenidos palestinos al imponerles restricciones más severas. El Servicio de Prisiones de Israel, limitó las visitas de los prisioneros enfermos y heridos a las clínicas médicas y canceló todos sus controles a pesar de muchos presentan síntomas del virus.

También ha impedido que los representantes legales y abogados de los prisioneros palestinos se comuniquen directamente, solo les permite contactar a sus clientes por teléfono, lo que les impide evaluar con precisión la salud y la seguridad de los detenidos.

Se han informado casos de presos a los que se les ha negado el acceso a productos y elementos de limpieza y se les ha pedido usar calcetines como mascarillas. Esto se suma a los comedores en las cárceles israelíes que han dejado de suministrar un total de 140 productos, incluidos los elementos vitales de limpieza.

El director del Centro de Estudios de Prisioneros, Raafat Hamdouna, dijo que la política israelí de negligencia médica se compone de cuatro elementos: falta intencional de un examen médico adecuado, falta de medicamentos adecuados, falta de pruebas de laboratorio y posponer cirugías urgentes.

Agregó que las autoridades israelíes impiden que el Ministerio de Salud palestino envíe medicamentos a los prisioneros palestinos.

A medida que aumenta la alarma por el peligro que representa el virus para los prisioneros, muchos han olvidado la tortura y la falta de atención médica que han estado matando a detenidos palestinos desde 1967.

Desde entonces, al menos 222 prisioneros palestinos han muerto en las cárceles israelíes; al menos 65 como resultado de la falta de atención médica, según la Organización de Prisioneros Palestinos.

A fines del año pasado, el preso político Sami Abu Diak murió de cáncer terminal. El prisionero, además sufría de insuficiencia renal y pulmonar mientras estaba detenido. Las precarias e inhumanas condiciones carcelarias y las permanentes e intencionales negligencias médicas provocaron la propagación de tumores en el cuerpo del hombre de 36 años.

Abu Diak se sometió a varias cirugías y sufrió una serie de complicaciones, sin embargo, las autoridades de ocupación israelíes se negaron a liberarlo por razones humanitarias.

Aquellos que han logrado sobrevivir a las décadas de detención, a menudo viven el resto de los años que les queda, con prolongadas enfermedades que los acompañan para siempre. Es un lento asesinato.

Nunca se tomaron precauciones para proteger las vidas de los prisioneros antes de la enfermedad del Coronavirus, altamente contagiosa. Es realmente impactante ver que el salvajismo en nada ha cambiado.

Durante décadas, los palestinos han perdido la vida como resultado de negligencia médica en las cárceles, mientras que la Comisión de Asuntos de Prisioneros explicó que el 95 por ciento de los detenidos son torturados desde el momento de su arresto.

Esto continúa durante el interrogatorio e incluso después de que los prisioneros son colocados en los centros de detención.

En lugar de acceder al tratamiento en el hospital, muchas veces permanecen recluidas en régimen de aislamiento.

Los diagnósticos erróneos son comunes, señaló Ehteram Ghazawneh, coordinador de la unidad de documentación e investigación en Addameer. Esto retrasa el acceso de los presos al tratamiento necesario y, en muchos casos, los lleva a la muerte, explicó.

Los presos han dicho que planean tomar medidas contra su condición de detención; Esto a menudo significa iniciar huelgas de hambre abiertas, que los dejan debilitados y más susceptibles a la enfermedad.

La ausencia de medidas de salud por parte de los carceleros israelíes para proteger a los prisioneros palestinos durante la pandemia mundial deja cada vez más claro que Israel busca aprovechar el virus mortal para deshacerse de su problema palestino.

Mientras el mundo está preocupado por tratar de hacer frente al mortal coronavirus y de rápida propagación, los palestinos continúan luchando para sobrevivir bajo una realidad que los ha dejado no solo prisioneros a la ocupación sino también susceptibles a enfermedades que, para los no palestinos, existe tratamientos y ayudas médicas.

Fuente: Middleeastmonitor.com

Traducción: PalestinaLibre.org

Colonos encapuchados incendian vehículos palestinos en la Cisjordania ocupada

Un grupo de colonos judíos encapuchados arrojaron piedras contra tres palestinos, los rociaron con gas pimienta y prendieron fuego a dos vehículos cerca del mar Muerto, en la Cisjordania ocupada.

El ataque fue perpetrado el 13 de abril por la noche aparentemente por un grupo de jóvenes colonos que están en cuarentena en una tienda de campaña provisional cerca de Metsoke Dragot, sin ninguna vigilancia.

El diario Yediot Ahronot señala que el grupo “de extrema derecha”, unas veinte personas, se encuentra en cuarentena temporalmente en esa zona después de que intentaran huir rompiendo las ventanillas de un autobús que los conducía a una instalación para que pasaran allí la cuarentena.

Los colonos son oriundos de Ytizhar, uno de los asentamientos judíos más radicales situado al norte de Cisjordania.

En un principio la Policía les ordenó que se quedaran en cuarentena en un hotel de Jerusalén, pero los jóvenes colonos lo abandonaron cuando se les dijo que permanecieran en habitaciones separadas.

El incidente se inició cuando dos colonos vieron a dos hombres y una mujer palestinos que estaban haciendo un pícnic en la zona. Los dos colonos fueron a la tienda a buscar refuerzos y una decena de estos atacaron a los palestinos haciéndoles huir antes de incendiar sus dos vehículos.

fuente: Sputnik

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