Catalunya: Comunicado de los independentistas de la CUP sobre la situación de Nicaragua

7 agosto 2018

Ante los hechos que están sucediendo en Nicaragua, la CUP queremos hacer una lectura en clave continental, partiendo del contexto actual de América Latina en que son constantes el intervencionismo imperialista por parte de Estados Unidos, las amenazas de bloqueo económico y los intentos de desestabilización de aquellos estados gobernados por las izquierdas. No podemos entender lo que pasa en Nicaragua sin recordar lo ocurrido en Venezuela, Brasil, Honduras y tantos otros lugares.

Los gobiernos progresistas de América Latina se encuentran frente un reto difícil: evitar que las oligarquías recuperen el poder ayudadas por el imperialismo, para poder seguir avanzando hacia un cambio social radical e irreversible. Esta resistencia y proceso revolucionario debe hacerse de la mano de la gente y de la movilización popular, agotando los procesos de radicalidad democrática y entregando el poder a las clases populares. Nunca en uso de la represión o de la violencia contra el pueblo. Nunca utilizando las herramientas políticas contra las que, precisamente, revoluciones como la Sandinista se levantaron. Promover, desde el gobierno, políticas patriarcales, represivas, de regresión de derechos básicos y de destrucción medioambiental significa dejar al margen un gran grueso de las clases populares y regalarle a la derecha y los sectores más reaccionarios un nicho de crecimiento.

El triomf de la Revolució Sandinista va marcar un abans i un després a Amèrica Llatina i va deixar empremta també als Països Catalans, on els moviments de solidaritat van prendre volada portant molts companys i companyes a lluitar colze a colze amb les sandinistes. El triunfo de la Revolución Sandinista marcó un antes y un después en América Latina y dejó huella también en los Países Catalanes, donde los movimientos de solidaridad tomaron vuelo llevando muchos compañeros a luchar codo a codo con las sandinistas.

Por todo ello, y siempre reivindicando la Revolución Sandinista hoy más que nunca amenazada por el conflicto, no podemos apoyar el gobierno de Ortega y Murillo en la respuesta represiva que está dando a las protestas que sacuden Nicaragua desde hace semanas. Un gobierno que lejos de escuchar las razones de fondo de muchas de las protestas de las clases populares, se enroca y reprime, en lugar de impulsar la organización y movilización popular.

Tenemos muy presentes los intereses geoestratégicos que motivan la injerencia extranjera en el devenir político y democrático del pueblo de Nicaragua: durante los últimos meses hemos constatado como ciertos sectores políticos -también de nuestro país- aprovechaban la difícil situación del país para practicar un intervencionismo que , disfrazado de “voluntad democratizadora”, se guía por unos intereses económicos y políticos determinados. Estas injerencias son radicalmente contrarias a los intereses de las clases populares de Nicaragua y de la radicalidad democrática, y no podemos hacer más que denunciarlos por cualquier medio. El conflicto que se vive en Nicaragua se debe solucionar en Nicaragua, a través del diálogo y la paz.

You must be logged in to post a comment Login