Uruguay. Se levantó la bandera insurrecta y revolucionaria del líder inclaudicable Raúl Bebe Sendic

Por Mónica Riet, Resumen Latinoamericano, 29 de abril de 2019.

Unos 500 trabajadores de la ciudad y del campo, grupos de militantes sociales, sindicales, de luchadores viejos y jóvenes se dieron cita en la mañana de hoy 28 de abril 2019, en Montevideo, en el Cementerio de La Teja, a 30 años de la partida física del Bebe Raúl Sendic, fundador del Movimiento de Liberación Nacional Tupamaros .

Con placas del MLN Tupamaros, y del Movimiento por la Tierra se identifica bajo una estrella dorada fulgurante, el lugar donde aún se agitan los restos y sueños del líder campesino, guerrillero, organizador de sindicatos rurales, dirigente político Raúl, Bebe, Ruffo, Sendic.

Mañana soleada que comenzó con la oratoria de Jorge Zabalza,”el Tambero”, que como Raúl y otros 7 dirigentes del MLN fueron tomados rehenes presos por la dictadura sobreviviendo a una década de oscuridad, aislamiento, privaciones sensoriales, tortura sin fin.

Pocas palabras para renovar compromisos. Recordar a los caídos, la consecuencia, convocarse a romper con 30 años de silencio oficial, de ellos 15 de gobierno progresista sin que se nombrara siquiera su legado. Un legado que hoy es imprescindible para saciar la sed de justicia. Un camino de salida para aquellos que ya no pueden vivir porque el sistema hambrea, esclaviza, asfixia, despoja, aplasta, embrutece, vacía de sentidos, enloquece.

30 años sin nombrar el nuevo grito de ALERTA que dió Sendic al salir de prisión. Un frente de pueblo unido tras una plataforma única. El Plan por la Tierra y contra la Pobreza que pretendía erradicar la pobreza, que apuntaba a tomar la tierra y empoderar a los jóvenes; nuevas víctimas segregadas del sistema capitalista.

30 años secuestrado su nuevo grito de Asencio para tomar el cielo por asalto con el horizonte de construir el socialismo con los de más abajo, laburando, peleando, empoderándose lejos de las urnas.

Proclamas de combate, poemas germinados en la trinchera, la palabra dura, fina, directa, hecha de miras y telescopios insomnes con la estrella del “Cristo” Tupa, Miguel Ángel Olivera, se hicieron sentir en el homenaje.

500 rostros ensimismados, corazones calientes, rumiando el desafío de una poesía con fondo de bandoneón, al lado del “innombrable”, “antisocial”, jefe tupamaro que sigue gritando desde la historia, con los “peludos”, cañeros de UTAA, reunidos al mismo tiempo en el norte del país, en Bella Unión, con su bandera  “Sendic, líder campesino” y “Por la Tierra y con Sendic”.

Siguió una marcha por Carlos María Ramírez hacia la plaza mil veces bautizada por la gente como “Raúl Sendic”, igual de veces negado el nombre, por la Intendencia progresista.

Allí, las proclamas recordaron el programa del Bebe: el programa del no pago de la deuda, estatización de la banca y el comercio exterior, expropiación de los campos de más de 2.500 hectáreas, un plan de emergencia pidiendo sacrificio a los ricos con impuesto a los grandes depósitos bancarios, al consumo de lujo, etc, un salariazo para elevar el nivel de consumo de los más oprimidos, reforma urbana, repoblación de la campaña…la tierra siempre la tierra en manos del que trabaja.

TRABAJADORES A LA AUTOGESTIÓN

El Movimiento por la Tierra tomó la palabra, como también Alejandro Acosta, dirigente sindical de los obreros de Montevideo Gas, servicio público de distribución de gas por cañería concesionado a Petrobras que está desmantantelando el servicio por falta de inversión, proyecto y reducción de personal. El sindicato decidió esta semana, en contra de un fallo del poder Judicial que les negaba la posibilidad de ocupar y de tomar la empresa bajo control obrero, hacerlo igual.

La voz pujante de los obreros reivindicando el derecho a tomar el control de los medios de producción al servicio del pueblo, cayó como una bomba implosionando la campaña electoral. Durante tres días el revuelo de la oligarquía en Uruguay reclamando poner fin al escándalo, al caos, a la dictadura del poder sindical, apropiándose, usurpando la santa propiedad privada, hizo volar el espíritu de Raúl Sendic en esa Plaza donde el banner de fondo del estrado resaltaba gigante con una sola palabra en rojo: REVOLUCIÓN.

Se oyó la voz de la Mesa de Colonos del Instituto de Colonización, creada para dar tierra a los pobres del campo denunciando y llamando a la solidaridad con una familia con 10 menores con décadas viviendo y trabajando allí que será próximamente desalojada de su fracción. Los pobres del campo siguen a la intemperie y corridos por el latifundio, la extranjerización, monocultivos depredadores voraces for export, y un Instituto de colonización.

El Colectivo Bebe Raúl Sendic se propone seguir impulsando y difundiendo el pensamiento y ejemplo revolucionario, original, crítico, del legendario Tupamaro, intentando tender puentes para unir al pueblo.

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