El imperio contra Venezuela: un twitt esta bien, pero no basta

POR GERALDINA COLOTTI. Resumen Latinoamericano, 22 marzo 2018

 

El twitt de apoyo a la Revolución Bolivariana, enviado desde los cinco continentes con el hashtag Todos Somos Venezuela ha subido rápido a la cima de las tendencias mundiales. Significa que existen áreas de movilización que, también en Europa, no soportan la arrogancia del imperialismo, impuesta por el gran gendarme norteamericano a un pueblo como el de Venezuela, que quiere construír el socialismo y no acepta vivir en un país con soberanía limitada.

 

Sinembargo, por cómo se estan poniendo las cosas, un twitt no basta, no basta manifestar un poco de indignación con un click, o sentados detrás de un teclado. No podemos ser espectadores de un desastre que los gobernantes de nuestros países han provocado y continúan a provocar. Un desastre que nos involucra, porque lo hemos visto llegar y no lo hemos sabido impedir.

 

En los cinco años transcurrido desde la muerte de Chávez, Italia ha sido un punto central en los ataques llevados a Venezuela, al gobierno de Nicolás Maduro. Aquí corren libremente ricos empresarios, que luego de haber hecho fortuna en Venezuela, han regresado a Italia a sabotear al socialismo, financiando representantes políticos nuestros, que siguen a ciegas a los banqueros y no más en defensa de las luchas sociales.

 

En el parlamento italiano, con el dinero de los contribuyentes, han sido invitados golpistas y manos de oro de la oposición venezolana, pintados como mensajeros de paz mientras devastaban las estructuras públicas y quemaban vivos a los trabajadores. Desde el parlamento italiano y desde aquel europeo, ha partido el apoyo criminal a las sanciones de Trump contra Venezuela. En los grandes medios, en la universidad, en las parroquias, se ha dejado mano libre al cuento de las derechas venezolanas, a la estrategia de la confusión que lamentablemente pega en esta Italia sin historia, prisionera de reflejos de orden y de autocensura.

 

Qué cosa hemos hecho para impedirlo? Muy poco. En cambio han hecho mucho rumor, también a la izquierda, poner reparos y tomar distancia de la Revolución Bolivariana cuando ésta ha tratado de salir del ángulo atacando algún golpe, como ha sucedido este verano con la Asamblea Nacional Consituyente.

 

Ahora, el momento es trágico. Es el momento de actuar. Para impedir que, a las elecciones del 20 de mayo, el socialismo bolivariano se consolide, para impedir que gane nuevamente el exobrero del metro, Nicolás Maduro, los Estados Unidos y sus vasallos han decidido apretar ulteriormente la cuerda de la horca. Trump ha emitido un decreto para bloquear todo tipo de transacción financiera a través del Petro. Se llama así la criptomoneda venezolana con la que el socialismo bolivariano esta tratando de sortear el criminal bloqueo económico-financiero impuesto por el gendarme norteamericano y por la Unión Europea.

 

Al mismo tiempo, la hipocresía imperialista grita “catástrofe humanitaria” y ofrece su mano peluda de injerencia y saqueo. Sabemos cuanta ayuda humanitaria han llevado a Haití, a Irak, a Libia, a Siria…Un artículo del New York Times, mientras tanto, habla del regreso de la tuberculosis, de epidemias y desnutrición. Y se disparan cifras absurdas para crear el problema de los prófugos venezolanos en las fronteras. Te cierran con llave la billetera y luego dicen que hambreas a la familia.

 

“No nos sirve ayuda humanitaria, sino el fin del bloqueo económico para pagar a nuestros abastecedores”, ha dicho el Ministro de Defensa Vladimir Padrino Lopez. Venezuela no es insolvente, y el gobierno bolivariano no hace pagar la crísis al pueblo. El General Padrino luego ha denunciado que un avión militar estadounidense nuevamente ha violado el espacio aéreo venezolano. Intimidaciones, mientras continúa la guerra sucia contra Venezuela: finaciando intentos de golpe interno, movilizando e infiltrando tropas paramilitares en las fronteras e intensificando los ataques internacionales a través de aquel revoltijo de países denominado grupo de Lima: 14 gobiernos neoliberales, repletos de bases militares estadounidenses, decididos a impedir que Maduro participe en la VIII Cumbre de las Américas, que se desarrollará en la capital peruana desde el 13 de abril. Una reunión a la que, por el contrario, irá Donald Trump para hacer escuchar al continente latinoamericano la voz del patrón.

 

Desde aquel púlpito desacreditado, desde aquellos países como Honduras o Colombia, donde las elecciones son una burla y un fraude, desde aquellos gobierno corruptos y serviles como el banquero Kuczynski que ya no es presidente, se define a Venezuela como una dictadura. Una dictadura porque está organizando su vigésima quinta elección? El mundo al revés, evidentemente, que se sustenta con la autocomplacencia de los dominantes. Hace parte de la teoría del Pentágono llamada “caos constructivo”. Luego de Irak, Libia, Siria, permitiremos que toque a Venezuela?

 

Traducción Gabriela Pereira

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