El Gobierno aprieta el acelerador. Como ya se supo ayer, el ejecutivo de Rajoy ha hecho caso omiso a las recomendaciones del Consejo de Estado y ha presentado un recurso al TC contra la propuesta de investidura de Carles Puigdemont que firmó el presidente del Parlamento, Roger Torrent. Así lo ha confirmado la vicepresidenta del Gobierno, Soraya Saénz de Santamaría, que ha recalcado que el gobierno continuará utilizará todos los medios jurídicos y políticos que tiene a su alcance contra el independentismo.

Santamaría dice que el gobierno no puede permitir la investidura de una persona que tiene una orden de detención de la justicia española. ‘Puigdemont no está en condiciones de ser presentado como candidato. Por lo tanto, el gobierno asume el compromiso de evitar que se vuelvan a vulnerar los principios democráticos ‘.

Así, el gobierno español, que tantas veces había criticado que el gobierno catalán por no haber hecho caso al Consejo de Garantías Estatutarias, obvia ahora las recomendaciones del Consejo de Estado. Santamaría dice que lo hacen con todo el respeto, pero que después de estudiar el dictamen, han creído oportuno presentar el recurso al TC.

Sin base legal

El anuncio de ayer de Santamaría, de pedir un informe al Consejo de Estado español para impugnar la candidatura de Carles Puigdemont a la presidencia de la Generalitat escandalizó ayer los juristas. La maniobra no tiene base legal de ningún tipo y vulnera los derechos de los diputados, además de ser contraria a los resultados de las elecciones del 21-D y en la voluntad de la mayoría del parlamento de apoyar la investidura de Puigdemont.

El informe negativo del Consejo de Estado  desautorizó la estrategia del Gobierno, que pretendía aprobar el recurso hoy al Consejo de Ministros y presentarlo al Tribunal Constitucional español (TC) para que suspendiera la sesión de investidura, convocada para el martes a las tres de la tarde. A continuación, Puigdemont pidió la dimisión de Sáenz de Santamaría.