No hubo espacios vacíos en el Instituto Cubano de Amistad con los Pueblos, ni hombres ni mujeres que no celebraran la victoria. Llegó invicto a nuestra tierra y cumplió un viejo anhelo de encontrase con sus hermanos. Oscar López Rivera, todo un símbolo de resistencia y de lucha por la independencia fue agasajado por aquellos que siempre estuvieron a su lado.
“Este día es un sueño cumplido. Este día es un sueño de amor a esta Patria, de amor a su pueblo, a la Revolución y a un hombre que nos dio un ejemplo de lo que es resistencia y lucha”, comentó durante el acto político- cultural que se celebró en la tarde de lunes en el ICAP.
El independentista boricua agradeció todos los gestos de solidaridad que permitieron su liberación y sobre todo al apoyo del pueblo cubano.
“Me siento lleno de humildad, lleno de amor y de gratitud por todo lo que el pueblo cubano ha hecho por nuestra Patria, pero también por todo lo ha hecho por los seres en el mundo que merecen justicia y dignidad. Nunca pensé que este día se lograría. Hoy alcanzamos algo que ejemplifica lo que se puede hacer cuando hay amor, cuando hay respeto al otro y a la otra, cuando se aspira a tener un mundo mejor y más justo”, agregó.
El líder independentista advirtió que “como puertorriqueños no hemos experimentado nunca como pueblo lo que es la libertad, sin embargo hemos luchado por descolonizarlo porque varadamente creemos en que pertenecemos a la comunidad de naciones latinoamericanas y que una nación pequeña puede transformarse en un país fuerte”.
Durante el homenaje, se le concedió la distinción “La Utilidad de la Virtud”, reconocimiento entregado por el Presidente de la Oficina del Programa Martiano y la Sociedad Cultural José Martí.
Así mismo el tricampeón olímpico Félix Savón entregó a López Rivera y como reconocimiento del Comité Olímpico Cubano un uniforme del equipo Cuba.
El Héroe de la República de Cuba, Fernando González Llort, quien fuera compañero de celda de Oscar por más de cuatro años expresó su alegría por poder recibir al patriota puertorriqueño. “Hablar de Oscar es un compromiso enorme, es difícil encontrar las palabras justas que sean capaces de expresar su grandeza, su obra y su ejemplo. Esa obra y ese ejemplo lo colocaron sin que él se lo propusieran en el más alto sitios de la resistencia a la dominación imperial”, señaló.
El también presidente del ICAP, acotó que pese a los múltiples esfuerzos nacionales e internacionales para lograr su excarcelación cumplió prisión por más tiempo que ningún otro en la historia de Puerto Rico, y su liberación se convirtió en contienda de los hombres de buena voluntad en todo el planeta.
“Nuestro pueblo conducido por la sabia de Fidel y de Raúl impregnaron a esta batalla la prioridad que ameritaba, conscientes de que luchando por su libertad también estábamos luchando por la independencia de su patria y por la libertad de los oprimidos del mundo”.
Recordó más adelante que fueron múltiples las jornadas de solidaridad en que el Instituto de Amistad con los Pueblos realizó en apoyo a su causa. “Nunca olvidaremos la alegría inmensa que se sintió cuando nos enteramos de tu regreso a Puerto Rico, tu tierra amada. Fue un día de gloria y celebración para todos nosotros. Hoy la emoción nos invade pues tenemos delante a un hombre modesto, ejemplo de resistencia y decoro”.
“El imperio quiso amedrentarte en sus mazmorras pero supiste con interesa la máxima martiana que un principio justo desde el fondo de una cueva puede más que un ejército. Sabemos que la verdadera razón por la que castigaban era por no rendirte, sostuviste tu moral revolucionaria contra todo tipo de fuerzas y provocación que en tu contra realizó el gobierno más poderoso de todo el planeta”, concluyó.
Asistieron al acto Teresa Amarelle, miembro del Buró Político del Partido y secretaria general de la Federación de Mujeres Cubanas, y José Ramón Balaguer, miembro del Secretariado del Comité Central del Partido y jefe de su Departamento de Relaciones Internacionales.
También se encontraban Ana María Mari Machado, vicepresidenta del Parlamento cubano, y los Héroes de la República Ramón Labañino, Gerardo Hernández y René González.
Declaraciones de Oscar López Rivera en Cuba
Oscar López Rivera recorre sitios históricos de La Habana
El líder independentista puertorriqueño, Oscar López Rivera, se mostró impresionado por la labor de restauración y comunitaria que se desarrolla en La Habana colonial, y particularmente por una muestra de documentos históricos que evidencian estrechos vínculos históricos entre Cuba y Puerto Rico.
En el Palacio del Segundo Cabo, el Doctor Michael González Sánchez, director de Patrimonio y el especialista Alexis Plasencia, de la Oficina del Historiador de la Ciudad, explicaron que fue especialmente montada la muestra con motivo de la visita del luchador boricua, en lo que constituyó la primera actividad del programa que cumplimentará en Cuba hasta el próximo día 26.
Los documentos evidencian la relación del independentismo y el nacionalismo puertorriqueños con Cuba y Emilio Roig (1889-1964), quien fue fundador de la Oficina del Historiador de La Habana (1935), amigo personal de Don Albizu Campos y creador, junto a otros cubanos, de la Junta Nacional Cubana Pro-Independencia de Puerto Rico.
Oscar también conoció la Plaza de Armas, punto generador del surgimiento de La Habana antigua; las Plazas Vieja y de San Francisco; calles y edificios, en un recorrido mañanero en el que estuvo acompañado por su hija Clarisa, Edwin González, delegado de la Misión de Puerto Rico en Cuba y representantes del Instituto Cubano de Amistad con los Pueblos (ICAP).
El héroe puertorriqueño agradeció la información histórica y las atenciones recibidas por parte de los especialistas de la Oficina del Historiador, y comentó con la nobleza y sencillez que lo caracterizan “lo más significativo de la lucha es la gente buena que uno llega a conocer”.
Luego de esta visita Oscar recibió un homenaje en la sede del ICAP y este martes será condecorado con la Orden de la Solidaridad que otorga el Consejo de Estado de la República de Cuba.
Cerca de la medianoche de ayer domingo arribó a La Habana el querido amigo borinqueño siendo recibido en el aeropuerto por quien compartió celda con él cuatro años en Estados Unidos, Fernando González Llort, presidente del ICAP. Oscar, símbolo patriótico de Puerto Rico, resistió con firmeza y honor casi 36 años en prisiones del imperio que nunca pudo doblegarlo, y continúa la lucha por la independencia de su patria y por un mundo mejor y más justo.
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