Nación Mapuche. El Centro Mapuche de Estudio y Acción ante las elecciones de 2017

Resumen Latinoamericano / 13 de noviembre de 2017

Mari mari, pu lamgen, pu peñi:

Hemos conformado una organización para participar en el proceso de liberación del pueblo mapuche, actuando en las comunidades y en las urbes, conociendo, y difundiendo la cultura y la historia de nuestro pueblo, generando propuestas, pero siempre sumados a las diversas luchas por la autonomía, la recuperación de tierra y territorio, la dignificación de nuestra identidad, los derechos ancestrales y universales en favor de nuestro pueblo.

Reconocemos como necesarias todas las formas de lucha, conforme a cada situación en el tiempo y en el contexto. Para vencer, hay que saber cómo, hay que unir fuerzas.

Frente a las elecciones de este año y elecciones en general, frente a la disyuntiva de votar o no votar, pedimos a las organizaciones y a cada mapuche y simpatizante de nuestra causa, que se respeten las diversas opciones que el pueblo mapuche organizado se dé a sí mismo.

Pero deben haber alternativas claras: el pueblo mapuche, los pueblos en general, no pueden seguir favoreciendo los intereses de sus enemigos, y sus enemigos ancestrales son los que hoy sostienen a la ultraderecha y a la Nueva Mayoría (que no tiene nada de popular).

Los gobiernos de la Nueva Mayoría han servido al capital transnacional. Los escándalos por coimas lo prueban y no necesitamos profundizar más en ello.

Las leyes y derechos internacionales que favorecen a los pueblos originarios, han sido anuladas o burladas por los gobiernos neoliberales: a la vez que aplican las leyes impuestas en dictadura, impiden el ejercicio de derechos ganados en siglos de luchas.

Es una contradicción ser mapuche y votar por asesinos y usurpadores de tierras.

Llamamos a no votar por la derecha concertacionista ni por la derecha pinochetista-piñerista.

A quienes crean que votando hay una solución para nuestras demandas, les pedimos que lo hagan por candidatos que se han ganado dignamente la confianza y la credibilidad de nuestro pueblo.

A quienes crean que no es votando como llegaremos al triunfo de nuestras demandas, les pedimos consecuencia y apoyar todas las demás acciones que ayuden a nuestra verdadera liberación.

Pedimos respeto para ambas opciones.

Más importante que el día de las elecciones, es el trabajo de cada día y de cada año en favor de nuestras demandas.

A todas y todos, pedimos sumarse activa y efectivamente en este proceso liberador. A vencer la pasividad, la indiferencia y el temor.

A crear organizaciones, a revitalizar las comunidades, a coordinar todo el quehacer disperso de la diversidad de organizaciones que muchas veces no se comunican o no se respetan entre sí.

A ser dignos hijos e hijas de Leftraru y de Wakolda, de Kilapan y de Katrilew.

Noviembre de 2017, a 136 años del Füta Malon, último gran levantamiento contra el Estado invasor.