URUGUAY: Comunicado en solidaridad con Venezuela Bolivariana (Agrupación Pro-unir)

Resumen Latinoamericano/Pro-unir, 23 de julio 2017.

FRENTE A LA ACTUAL SITUACIÓN EN VENEZUELA
La situación de confrontación política y social en VENEZUELA ha alcanzado elevados niveles de tensión como nunca antes en el proceso bolivariano iniciado en el año 1999.
La derecha reaccionaria se ha lanzado en un camino insurreccional con todo su potencial interno y vasto apoyo de las potencias imperialistas de EEUU y Europa y los regÍmenes derechistas latinoamericanos, aprovechando, en este último caso, el avance de este sector con los cambios de gobierno realizados en Argentina, Brasil y, más anteriormente, Paraguay y Honduras.
Manifestaciones violentas con ataques a centros comunitarios, hospitales, depósitos de alimentos, edificios públicos y hasta cuarteles. Uso de grupos paramilitares para cometer asesinatos de militantes políticos y sociales chavistas y hasta de simples transeúntes que pasan cerca de las barricadas, desde donde tratan de desquiciar la vida cotidiana de la población.
Esta estrategia destituyente ha escalado a dos niveles: en el plano internacional se sigue una estrategia de aislar en América Latina y a nivel mundial al gobierno bolivariano. En este plano, si bien los derechistas han logrado sumar a varios países a sus planes, no han logrado las mayorías requeridas para aplicar la expulsión de Venezuela de la OEA o del Mercosur. En el plano mundial, el gobierno de Venezuela cuenta con el respaldo o simpatía de muchos países africanos, de Medio Oriente y Asia, además de varios importantes por su peso económico, polÍtico y militar como Rusia, China e Irán.
El otro plano es el interno: la derecha está buscando la deslegitimación del gobierno presidido por Nicolás Maduro. Para ello fue la organización de un seudo plebiscito o consulta, sin ninguna base legal ni organización por parte del Poder Electoral y sin la más mínima garantía en sus resultados objetivos. La gran prensa mundial por otra parte ocultó la movilización popular de varios millones de personas en el simulacro organizado por el Consejo Nacional Electoral, en preparación para la elección de la Asamblea Nacional Constituyente del domingo 30 de julio. Ahora la derecha intenta formar un gobierno paralelo, incluso para legitimar una intervención militar imperialista en el país.
Nunca antes, ni siquiera en el primer periodo que siguió a la declaración del carácter socialista de la Revolución Cubana en el año 1961, hemos asistido a una campaña en los medios mundiales hegemónicos, tan denigrante, tan agresiva, de una total distorsión de la realidad y tan plagada de mentiras, como la que se realiza en estos momentos contra Venezuela y su gobierno.
LO QUE SE JUEGA con el porvenir del proceso bolivariano
Una derrota y desintegración de dicho proceso, con el derribo del gobierno presidido por el cro. Nicolás Maduro y la vuelta al poder de la derecha, tendría sin dudas enormes consecuencias internas y externas.
Internamente, la derecha llevaría adelante una política revanchista y represiva, frente a las cuales las que están practicando gobiernos como el de Temer en Brasil y Macri en Argentina, serían casi juegos de niños. A nivel latinoamericano y mundial, sería un gran golpe para las fuerzas populares y auténticas de izquierda, que luchan por la liberación de los pueblos y el socialismo. Sería también un gran golpe contra Cuba, generando una situación económica y política más difícil para su gobierno.
Más allá de contradicciones, debilidades, deficiencias y carencias políticas del proceso bolivariano, tenemos absolutamente CLARO la necesidad de la solidaridad firme con el proceso y su gobierno, en esta hora difícil y decisiva que se está atravesando.
Nos parece lamentable que sectores que se autodefinen todavía como de izquierda apoyen a una derecha que no tiene nada de democrática y si mucho de fascista. Y otros sectores, estos con un perfil de verdadera izquierda, “balconeen” esta confrontación igualando a ambos contrincantes en su naturaleza política y de clase e incluso apostando a que una caída del gobierno de Maduro, abrirá camino a una imposible radicalización revolucionaria, cuando, en realidad, lo que ocurriría sería el retorno salvaje de la derecha más cerril.
La Asamblea Constituyente y sus tareas
La convocatoria a la elección de una Asamblea Nacional Constituyente para el domingo 30 de julio es una oportunidad para que el chavismo se repotencie, después del desgaste y erosión del respaldo popular que se manifestó con la perdida de las elecciones legislativas del 2015. Esta Constituyente deberá ser aprovechada para PROFUNDIZAR en términos definitivos el proceso hacia el socialismo, quitándole el considerable poder económico que aún disfruta la gran burguesía y que ha sido usado por ésta, para una desquiciante “guerra económica” que ha golpeado muy duro a los sectores populares.
Deberá además llevar con mayor fuerza el Plan de la Patria, el legado póstumo del Cdte. Chávez para construir una Venezuela socialista y terminar de sustituir el actual Estado burgués por el Estado popular y comunal, con la clase trabajadora y los sectores populares como centro y la comuna como organización de base.
¡A contrarrestar la campaña denigratoria del imperialismo y de sus secuaces en cada país! ¡A aunar todos los esfuerzos posibles y juntar a todos aquellos que estén a favor de defender a la Venezuela bolivariana, estén donde estén, para acciones de solidaridad conjunta!
¡IMPERIALISTAS, VENEZUELA NO SE TOCA, VENEZUELA SE RESPETA!
Agrupación Nacional Pro UNIR (pro Unidad de la Izquierda Revolucionaria)
UNIDAD POPULAR

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