Rita Segato y la Pedagogía de la Crueldad

Por: Juana Quiroga / Resumen Latinoamericano / 18 de Julio de 2017//

El pasado miércoles asistimos a un encuentro con la antropóloga feminista Rita Segato, organizado por la radio FM La Tribu, de Buenos Aires.
Recién llegada a la Argentina, Rita habló sin apegarse a un guión, sino hilvanando ideas y conceptos de su propia autoría en un recorrido libre que abrió múltiples puntos de reflexión.
Comenzó por describir su concepto de Pedagogía de la Crueldad, que postula que en la historia de la humanidad coexisten dos proyectos opuestos: el de las cosas, que produce individualismo, y el de los vínculos, que produce comunidades. En nuestro día a día participamos de ambos mundos, pero existe una tendencia a nivel mundial donde el mundo de las cosas cobra cada vez mayor importancia. Las cosas son más importantes que las personas y tratamos a las personas como cosas.
Segato, que nació en Brasil pero ha recorrido múltiples países de Nuestramérica, destacó que en Argentina aún se conservan bastantes elementos de comunidad, incluso en grandes centros urbanos: la institución de la amistad se mantiene fuerte, el diálogo es visto como riqueza y no como pérdida de tiempo, y muchas veces elegimos sacrificar bienes materiales en pos de nutrir vínculos. Esto ofrece cierta protección contra la Pedagogía de la Crueldad: la relación que se establece con el otro a partir de vincularse de la misma manera que con un objeto, sin empatía.
La capacidad de ponernos en el lugar del otro es la condición de sentir empatía y generar cuidado y respeto. Nuestra piel es cada vez más dura y la mayoría de los medios fomentan el morbo.
Ejemplificó este endurecimiento de la piel colectiva de la sociedad con la película La Naranja Mecánica. En el momento de su lanzamiento, fue escandalosa por su crueldad, hoy las mismas escenas son miradas en clave de comedia.

Femicidios y medios

Los relatos mediáticos sobre femicidios tienden a describir con detalles morbosos la violencia, lo cual está comprobado que tiene un efecto de contagio en la sociedad, por el cual se empiezan a copiar las modalidades. Esto mismo sucede con el suicidio, donde una noticia sobre un suicidio tiende a provocar más suicidios y en modalidades similares. Los medios decidieron tomar una medida ética de no reportar casos de suicidio para no generar contagio, y por esto no vemos noticias sobre el tema en medios hegemonicos. Pero con el femicidio no ocurre lo mismo. Hay un placer morboso en las descripciones de la violencia.
Otro problema que encuentra la antropóloga es el de la descripción del femicida como un monstruo. El problema es que los monstruos son temibles, pero poderosos. Y el poder es uno de los mandatos masculinos según el sistema patriarcal: los hombres deben ser poderosos. El mandato masculino ice que los hombres deben ejercer el poder, y a veces tienen que usar la violencia para hacerlo respetar. Entonces hasta cierto punto el monstruo de las historias de femicidio termina siendo una figura a imitar para ciertos hombres machistas.
Violencia sexual sobre el cuerpo femenino
Se adentró en la cuestión del tráfico de mujeres con fines de explotación sexual, destacando que esta se encuentra íntimamente ligada a explotaciones productivas con gran cantidad de empleados masculinos y aisladas de centros urbanos, como la minería y la explotación de petróleo.
Rita cuestiona la extendida creencia de que el deseo masculino sea incontrolable y deba ser aplacado a toda costa. La función del prostíbulo en estos lugares es la de instalar de manera “rápida y efectiva” la pedagogía de la crueldad en los hombres. El acto de ejercer conjuntamente el poder sobre otro cuerpo es un ejercicio que enseña, mediante un rol activo, a tratar a las personas como objeto, y prepara al obrero para adoptar el rol pasivo en el trabajo.
Remarcó que la violencia sexual se usa como forma de tortura y arma de guerra, que se justifica diciendo que “los hombres tienen deseos que no pueden controlar”, lo cual separa a este crimen de otros crímenes de guerra y lo invisibiliza como tal.
Territorios corporales y geográficos
Estando en País Vasco, Rita empezó a hallar continuidades al estudiar la violencia ejercida por el Reino Español sobre ese y otros territorios. Las modalidades de violencia ejercidas por el imperialismo español en territorios europeos resonaban en la ejercida sobre los pueblos conquistados por la corona en América Latina. Al indagar un poco más sobre este fenómeno, Rita encontró un dato elocuente: la llamada “reconquista” de la península ibérica terminó en 1492, año del “descubrimiento” de América. Las mismas formas de violencia se trasladaron del viejo continente al nuevo.

La política y la mujer

Además, Rita compartió con nosotros y nosotras algunas ideas sobre las que está trabajando actualmente, y que se encuentran “en construcción”. Parten de una constatación de que históricamente el ámbito del hogar fue reservado a la mujer y el ámbito político público al hombre. Estos dos ámbitos constituyen dos esferas de poder, uno de poder femenino y otro de poder masculino.Segato sostiene que, contrariamente a lo que algunxs piensan, el ámbito del hogar no está subordinado al ámbito político, sino que tienen igual jerarquía. Esto configuraba un ámbito de poder para las mujeres, que fue perdiéndose a medida que el hogar pasó a ser cada vez más una institución privatizada. Mientras tanto, el paso de las mujeres a ámbitos públicos de poder no se produjo de una manera que alcance a complementar esta pérdida.

Resaltó que en el ámbito de la política hay un movimiento regresivo que tiende a ubicar a la mujer como adorno: tres figuras presidenciales recientemente investidas de América (Donald Trump, Mauricio Macri y Michel Temer) van acompañados de esposas que encarnan este estereotipo, lo cual, advierte Segato, no es casual.

Colombia y la violencia machista

Rita trajo a colación una pregunta que le habían hecho recientemente en sus viajes: ¿cómo cree ella que se puede solucionar el problema de la violencia en Colombia? Reflexionó que sólo se acabaría con la violencia si se termina con la cultura machista que impone a los hombres el mandato de ejercerla, que es fomentada por las instituciones militares y policiales del país, que son profundamente machistas.En este punto, Resumen Latinoamericano preguntó a Rita qué opina de la violencia ejercida desde abajo, y de la igualdad de género que se constata en las fuerzas guerrilleras como el ELN y las FARC. Rita respondió que su análisis anterior sólo se refería a la violencia ejercida desde el poder hegemónico, y que en efecto ella creía que las FARC habían logrado una total igualdad de género, con mujeres en posiciones reales de máximo poder. Nos quedó pendiente preguntar qué importancia relativa le otorga al cumplimiento de derechos básicos de la población en la conquista de la paz (la “paz con justicia social” que promueven las FARC).

Continuó hablando sobre Colombia con un dato novedoso para la audiencia, que era mayormente argentina. Nos comentó que, cuando se llevó a cabo el plebiscito popular para ratificar o rechazar los acuerdos de paz hechos para las FARC, que lamentablemente fue un fracaso debido a la campaña difamatoria de la derecha, el discurso patriarcal y anti-feminista que usó la derecha para criticar la presencia de “ideología de género” en los acuerdos estuvo fuertemente basado en el pensamiento de un ideólogo de la derecha argentina, que goza de poca incidencia en su propio país: Agustín Laje.
Estos fueron algunos de los puntos tocados por Rita Segato en este recorrido libre, en el que fue hilvanando distintos temas, todos ellos complejos y urgentes, que resultaban más accesibles y claros gracias a su profundo análisis sobre sociedad y género. No hay mejor invitación que ésta para adentrarse más en sus ideas, las cuales están abordadas con mucho mayor detenimiento en su extensa obra escrita.

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