La manifestación avanzó por Corrientes y era encabezada por trabajadores de la empresa multinacional, quienes protestaban por los más de 600 despidos realizados tras el cierre de una planta en Vicente López. Del reclamo participaron varios diputados y dirigentes de izquierda, como Nicolás del Caño y Myriam Bregman (PTS-Frente de Izquierda), Gabriel Solano (Partido Obrero-Frente de Izquierda), el metrodelegado Claudio Dellecarbonara, la precandidata a diputada Vilma Ripoll (MST), entre otros.

“Exigimos que se garanticen los puestos de trabajo de todos los trabajadores de PepsiCo”, afirmaron los empleados mediante un comunicado.

La movilización aglutinó una gran cantidad de gremialistas y activistas sindicales, ya que se sumaron a la protesta representantes de las dos CTA, Camioneros, AGTSyP, Foetra, ATE, UTE-CTERA, Ademys, Suteba, Unión Ferroviaria de Haedo y AGD-UBA. Además, participaron diferentes agrupaciones de derechos humanos.

Poco después de las 7 de la mañana empezaron a aparecer los primeros manifestantes en la esquina de las avenidas Corrientes y 9 de Julio, mientras que la propia Policía de la Ciudad ya desplegó varios móviles en la zona.

Ya a las 7:30 había centenares de manifestantes dispuestos a iniciar la medida de fuerza, en medio de un contexto de creciente tensión por el despliegue del operativo policial. Hacia las 8, el grupo cortó la avenida Corrientes y uno de los carriles de la avenida 9 de Julio, mano a Constitución.

“No tenemos temor de la policía, nuestro temor es quedarnos sin trabajo y que nuestras familias queden en la pobreza y la miseria, que nuestros hijos no puedan ir a estudiar y no tengan salud. Queremos volver a trabajar y que la multinacional PepsiCo vuelva a tomarnos ya que la planta está en perfectas condiciones de producir”, aseguró Camilo, delegado de la planta alimenticia.

Sobre el despliegue de los uniformados sobre la principal avenida del país, el representante gremial sostuvo: “El operativo policial es enorme porque al parecer el Gobierno solo tiene una política represiva hacia los trabajadores, pero nosotros vamos a seguir manifestándonos hasta recuperar nuestros puestos de trabajo”.

Poco después de las 9 de la mañana, el corte interrumpió por un breve lapso de tiempo el funcionamiento del Metrobús, lo que incrementó el clima de tensión entre manifestantes y la Policía. Luego, la movilización levantó ese bloqueo y avanzó por Corrientes hacia el bajo en dirección a la sede del Ministerio de Trabajo.

Además de la movilización en el Obelisco, se esperaban manifestaciones de apoyo en ciudades del interior del país, con las ciudades de Neuquén, Rosario y Córdoba como principales puntos de referencia de la protesta.

La manifestación se produce en medio de un conflicto entre trabajadores y la empresa. Según los empleados, la compañía ofreció algunos traslados a la ciudad de Mar del Plata, donde pronto se abrirá una fábrica. Además, denunciaron mecánicas de extorsión por parte de la compañía y ofertas ‘a dedo’ de retiros voluntarios.

Tras anunciar el cierre del lugar, PepsiCo explicó que ha tomado “la difícil decisión de cesar las operaciones de la planta ubicada en la localidad de Florida, debido a los obstáculos inherentes a la ubicación de la planta en un área mayormente residencial, su compleja estructura de costos y extensos requerimientos logísticos”.

Durante la tarde del lunes, los trabajadores realizaron una presentación judicial contra lo que calificaron como un “cierre fraudulento” de la planta y un “lock out ofensivo”.

En tanto, hubo también una audiencia pública en el Congreso para tratar el cierre de la planta de Vicente López y los despidos.