Colombia. Encuentro con un joven neo-ingresado a la guerrilla.

Por Giacomo Finzi, corresponsal de Resumen Latinoamericano en el Caguãn, Colombia/ 19 de Septiembre 2016 .-

 

En el medio de la Décima Conferencia de las F.A.R.C.-E.P., Resumen Latinoamericano tuvo la oportunidad de conversar con Santiago, de 23 años, que se integró a la guerrilla ya mientras las negociaciones de paz de la Habana estaban en curso.

Santiago es originario del Caquetá, de una vereda cerca del campamiento de ‘El Diamante’ de las F.A.R.C.-E.P. (lugar establecido para la Décima Conferencia)El joven desde pequeño ha tenido contactos con la insurgencia y desde muy pequeñoquería entrar a la guerrilla. Sin embargo, cumplió la decisión de integrarse a los 21 años, después de haber realizado algunas colaboraciones juveniles para la guerrilla. Santiago aclara que el proceso de afiliación a la insurgencia fue totalmente voluntario, sin que en ningún caso se ejercieran algún tipo de presión. Y así sería, según él, la gran mayoría de los integrantes de las F.A.R.C.-E.P. que no han sido, de ninguna forma, reclutamientos forzados.No es el único integrante de la insurgencia de la familia, sino que también un hermano y un tío se han afiliado a las F.A.R.C.-E.P.

Aunque no haya tenido que enfrentar directamente al enemigo en combate y que su afiliación es muy cercana al período de la declaración de cese al fuego unilateral de las F.A.R.C.-E.P., conoce la dureza del conflicto armado en toda su crudeza. Ha visto en sus propios ojos un camarada perder el entero brazo, tratando de desactivar una mina anti-personal en la región del Caguán. Esto ha sido uno de los momentos más duros en su permanencia en la insurgencia.

Santiago nos habla con honestidad y confianza sobre el proceso que se va abrir después de la firma de los acuerdos de paz, el día 26 de Septiembre en la Ciudad de Cartagena de las Indias. Aunque todavía no sepa dónde exactamente cuál va ser la zona veredal transitoria(Z.V.T.) en que se desplazará, afirma que es su intención seguir la lucha política, dedicándose a la actividad del movimiento que surgirá de la Décima Conferencia de las F.A.R.C.-E.P. Espera con ansiedad este momento, que le permitirá de seguir sus ideales.

En efecto, su decisión de integrarse a las F.A.R.C. y sus motivaciones siguen en pie, porque, según sus declaraciones, la lucha política va ser dura, porque va ser un inmenso trabajo lo de convencer a los y las colombianas de lo justo de la lucha de la insurgencia, manipulados y dirigidos por la prensa nacional (en la entrevista nos menciona sobre todo el papel de R.C.N. y Canal Caracol, los principales canales televisivos colombianos, que contribuirían a la desinformación del país y al fortalecimiento de los prejuicios hacia la insurgencia). Al mismo tiempo, mostrando mucha confianza sobre el proceso de paz, está convencido de que la lucha política del movimiento surgido de las F.A.R.C.-E.P. sabrá conquistar los corazones de las y de los colombianos. De esta lucha, que para él sigue siendo ‘justa’, emergerá la verdad sobre lo que son y lo que representan las F.A.R.C.-E.P. para la historia de Colombia, el significado de su lucha política, a lo largo de más de 52 años de confrontación armada. De este proceso, emergerán las responsabilidades y los crímenes de Estado y de sus aliados.

Reconoce la importancia del proceso de paz y de la firma de los acuerdos de paz, incluso, por lo que significaría para el proceso de dejación de armas y de reinserción a la vida civil. Para él, la desmovilización militar no es el final de la lucha, sino el fin de la experiencia armada y, desde luego, el comienzo de una nueva batalla: la política, la actividad que las F.A.R.C.-E.P. ha siempre acompañado a la lucha armada, incluso en sus momentos más difíciles.

 

 

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