Los responsables del terrorismo

por Michel Collon / Resumen Latinoamericano/ 26 de Julio 2016.-

Un estudiante francés de origen marroquí, Amin, me escribe lo siguiente:

“No hay excusas o justificaciones para la barbarie, pero seamos conscientes de que el monstruo no nace, sino que se fabrica. En nuestro territorio (en Francia, en Bélgica) se fabrica en el rechazo, la exclusión, la humillación, la explotación y el abandono, frente al discurso de extremistas y fanáticos de todos los bandos. Fuera de aquí – dice – se fabrica en la matanza, la destrucción, la desesperación, y bajo las bombas de los sanguinarios de todos los bandos.”

– Y termina diciendo: “la humanidad es una y es indivisible, no hay ninguna diferencia entre el llanto de una madre que ha perdido un hijo en el bombardeo del hospital de Kunduz por las fuerzas de la OTAN, y el de un padre que ha perdido su hija en un concierto en el corazón de Paris.”

Como he dicho a menudo, nuestra emoción y condolencias son para las familias de la victimas de todo el mundo. Pero también plantean la exigencia de verdaderos debates. Insisto diciendo claramente, que más allá de los hechos, necesitamos las causas. E insisto y digo:

Yo acuso a los señores Fabius, Hollande, Valls de ser responsables por lo que pasó en Paris, por la sencilla razón de que Fabius declaró: “Al-Nusra –es decir, Al Qaeda en Siria– hace un buen trabajo”, reconociendo asi la alianza de facto entre Francia y los terroristas en Siria, como antes fue el caso en Libia y en otros países.

Yo acuso las relaciones con los regímenes de Arabia Saudí y Qatar, que propagaron este adoctrinamiento, esta intoxicación, de algo que se pretende islamista pero que no tiene nada que ver con el Islam, que es una falsificación del Islam. Y yo no soy el único en acusar, ya que el señor Alain Chouet, quien era responsable de DGSC (Dirección General de la Seguridad Exterior) declaró, le cito:

“En Medio Oriente, en Sahel, en Somalia, en Nigeria, nosotros Francia somos aliados de aquellos que esponsorizan, desde hace 30 años, el fenómeno terrorista – Aliados con aquellos que sponsorizan el terrorismo. Y el continúa – nos cansamos atacando a los que ejecutan, es decir, a los efectos del Wahabismo, pero no a sus causas y no lograremos detener los atentados, a menos que coloquemos un policía detrás de cada ciudadano.”

Yo acuso la alianza con Arabia Saudita y Qatar.

Y acuso la alianza con Turquía que ha dejado pasar miles, decenas de miles de “euroyihadistas” sobre su suelo, para ir a cometer en Siria las mismas atrocidades que vemos ahora en Paris. Yo acuso a Turquía de ayudar a comercializar las reservas de petróleo de Daesh y a financiar este movimiento terrorista.

Y no soy el único, la señora Hybaskova, quien es la embajadora de la Unión Europea en Irak, declaró a la Comisión de Asuntos Extranjeros del Parlamento Europeo, la cito:

“Desgraciadamente, hay Estados miembros de la Unión Europea que compran este petróleo, pero no puedo dar más detalles.”

Yo acuso esta alianza con Turquía de ser funcional al terrorismo. Y de una forma general, yo acuso a Estados Unidos de haber utilizado el terrorismo, donde sea que le fuera útil, donde sea que ellos mismos no se atrevieran a usar sus tropas terrestres. Esto comenzó con la operación Bin Laden en Afganistán, continuó en Yugoslavia, Bosnia-Kosovo, en el Cáucaso, luego en Irak, Libia y Siria, habiendo todavía otra serie de países. Estados Unidos en ciertos momentos combate el terrorismo y en otros lo utiliza cuando eso les conviene.

Y, alguien dirá, ¿Cómo explica usted que si ellos financiaron el terrorismo, ahora estos terroristas vienen a golpear el centro mismo de Francia sobre el suelo Europeo? No hay que ver esto como un complot donde la CIA organiza todo de A a Z y controla todo infaliblemente. Si, ellos lo organizan, pero no por ello es un complot. Es una alianza entre fuerzas que existen y que tienen su propia agenda. Lo mismo que Bin Laden, quien había trabajado para Estados Unidos y luego se volvió contra ellos. Ahora tenemos Al Qaeda en Siria y Daesh y todos esos movimientos terroristas que trabajaron para Estados Unidos, pero que tienen su propia agenda, y ahora se ponen en su contra porque la alianza ya no da más de si.

Yo acuso de una forma general también a EEUU de haber mostrado el ejemplo de la violencia, de haber conducido guerras todo el tiempo desde hace 25 o 30 años y de haber mostrado a todos los pueblos que hay que intentar, como pretenden, resolver los problemas por medio de la violencia. Les recuerdo que la Carta de la ONU prevé que todos los conflictos deben ser negociados, y que no tenemos el derecho de hacer la guerra. Está estrictamente prohibido por la carta de la ONU desde 1945 y les recuerdo que Wesley Clark, un general de los EEUU había revelado que la administración de  EEUU en 2001 había decidido tomar, yo cito, siete países: Afganistán, Irak, Irán, Somalia, Sudán, Libia y El Líbano, ellos ya lo habían anunciado en 2001. Por lo tanto ya había un programa para desarrollar la guerra.

Yo acuso esta alianza con Israel por envenenar, por sembrar un clima de odio en Medio Oriente y por mostrar que puede mantenerse el colonialismo por medio de la violencia y, por rechazar negociar. Esto es sobre el plano de las causas exteriores del terrorismo, pero hay también causas interiores en Francia, en Bélgica, en los países europeos, que hacen que ciertas personas caigan en el engaño de este terrorismo.

Y yo acuso la discriminación racista hacia los inmigrantes, ya sea referida al empleo o a la vida cotidiana. La discriminación, los perfiles raciales, los controles, la humillación policial, eso evidentemente provoca una rabia, un enojo que, la mayoría de las veces, busca expresarse de una forma totalmente positiva, y en el caso de uno u otro que se vuelve loco a causa de esta indignación y de este desprecio, nos hacemos intoxicar pero por gente que, de hecho, son “amigos”, ya que es Arabia Saudí el país que intoxica a los jóvenes de los barrios populares para utilizarlos como carne de cañón.

Por lo tanto yo acuso esta discriminación racista y acuso igualmente el hecho de que algunos le impiden a la escuela desempeñar el rol que debe desempeñar. Quisiera recordarles, que cuando tuvimos los atentados odiosos contra Charlie, tuvimos enseguida la ministra de educación francesa Najat Vallaud-Belkacem que declaró, le cito:

“Hubo numerosísimos cuestionamientos de parte de los alumnos y todos hemos escuchado: ‘sí, yo apoyo a Charlie, y cuando se cuestionan las dos varas de medir, es decir, ¿por qué defender la libertad de expresión aquí y no allá?’ –y la ministra continúa–, esas preguntas nos resultan insoportables, sobre todo cuando las escuchamos en la escuela, que es la encargada de transmitir valores.”

Pero eso no es la escuela, eso es la policía! Una ministra de la educación que dice que los jóvenes no tienen derecho de cuestionar las cosas y discutir con sus profesores. Pero es así exactamente como empujamos a los jóvenes en los brazos del terrorismo. Yo estuve el sábado pasado en una reunión de profesores para la escuela democrática, aquí en Bruselas, talleres donde los profesores intercambian sobre la manera de formar, lo mejor posible sus jóvenes, y todos me decían lo extremadamente difícil que es actualmente, como nos faltan elementos y a menudo estamos desmotivados a lanzar verdaderos debates y desarrollar verdaderos conocimientos sobre todos estos problemas entre los jóvenes.

Yo acuso la amalgama hecha actualmente entre los migrantes, los refugiados, los terroristas, los islamistas, etc. No es un problema de migrantes. Esa gente no deja su país porque quieren venir a nuestro buen clima o porque tienen pensamientos oscuros. Esa gente deja su país para huir de la miseria y la guerra que nosotros, gobiernos occidentales, hemos llevado a su país.

Somos nosotros quienes hemos destruido su país. Los migrantes peligrosos, no son aquellos que intentan cruzar el Mediterráneo para salvar sus familias de la miseria o de la muerte. Los migrantes que son peligrosos son las personas como Sarkozy, como Bernard Henry Lévy, que se dan el derecho de ir a Libia y decir, ustedes tienen que hacer esto, ustedes tienen que derribar este gobierno, ustedes tienen que darle el petróleo a Francia, obviamente. Esos son los migrantes peligrosos. O bien, Hollande, Valls, Fabius, que van a Siria como si fuera su casa y deciden todo lo que debe hacer Siria. Esos son los migrantes peligrosos desde mi punto de vista.

Y yo acuso finalmente, el hecho de que ciertas personas intenten utilizar estos eventos trágicos para propagar el odio hacia los musulmanes, para propagar la islamofobia. Esa es una cosa que yo ya había explicado y que hemos visto recientemente. En la televisión no hemos tenido prácticamente debates donde pudiéramos verdaderamente discutir sobre el fondo de las cosas.

Y en lugar de eso, hemos tenido, a veces, llamados al odio absolutamente asombrosos. El domingo pasado en la televisión belga, tuvimos a un tal Moniquet que, dicho por él mismo, ha trabajado para el servicio secreto francés-israelí, alguien de la extrema derecha, y él dijo lo siguiente:

“No hay democracia en el mundo árabe, no hay una universidad válida en el mundo árabe, hay pocas creaciones artísticas en el mundo árabe, no hay creaciones científicas en el mundo árabe, bueno, ya sé, me dirán en el siglo 7, si, pero estamos en el siglo 21.”

Pero eso es completamente falso, ese es el problema. No es un problema de árabes o musulmanes o cristianos. Bush se decía cristiano e hizo los horrores que hemos visto en Irak y en otras partes, pero no vamos a tirar a todos los cristianos al infierno porque Bush haya hecho eso. Es lo mismo, lo que pasa acá, no tiene nada que ver con la religión Islam. Y yo quisiera remarcar dos cosas. Cada vez que hubo, en el mundo árabe o musulmán, dirigentes que eran demócratas o que no eran demócratas pero que en todo caso eran laicos y querían modernizar su país, ¿que hizo el occidente? El los ha asesinado o los ha derrocado. Hemos hecho eso en Egipto, hemos hecho eso en Irán, hemos hecho eso en Libia, hemos hecho eso en Siria. Por lo tanto, hay de todas formas una hipocresía fundamental, ustedes se quejan porque el mundo árabe y musulmán no es democrático, pero cada vez que hay un demócrata ustedes lo derrocan para que las multinacionales puedan controlar el petróleo y robar los pueblos locales, lo que es evidentemente, muy democrático.

Por lo tanto, estamos en la hipocresía absoluta y entonces aprovechamos para divulgar un discurso de pánico y miedo hacia los musulmanes, que son peligrosos. Y evidentemente así, lo único que hacemos es tirar combustible sobre el fuego.

En realidad, nuestros gobiernos no nos protegen. Yo pienso que son ellos los que han creado el riesgo de estos atentados en Paris y en otras partes. Y no soy el único en decirlo.

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